MOSCÚ, 16 agosto 2024 (Reuters).- Un influyente asesor del presidente ruso, Vladimir Putin, dijo el viernes que Occidente y la alianza de la OTAN liderada por Estados Unidos habían ayudado a planificar el ataque sorpresa de Ucrania a la región rusa de Kursk, algo que Washington ha negado.
La incursión relámpago, la mayor en Rusia por parte de una potencia extranjera desde la Segunda Guerra Mundial, comenzó el 6 de agosto cuando miles de tropas ucranianas cruzaron la frontera occidental de Rusia en una gran vergüenza para el ejército de Putin.
Ucrania dijo que la incursión era necesaria para obligar a Rusia , que envió sus fuerzas a Ucrania en febrero de 2022, a iniciar conversaciones de paz “justas”.
Pero Estados Unidos y las potencias occidentales, deseosas de evitar una confrontación militar directa con Rusia, dijeron que Ucrania no había dado aviso previo y que Washington no estaba involucrado, aunque se informó que se utilizaron armas proporcionadas por Gran Bretaña y Estados Unidos en suelo ruso.
El influyente y veterano halcón del Kremlin, Nikolai Patrushev, desestimó las afirmaciones occidentales en una entrevista con el periódico Izvestia.
“La operación en la región de Kursk también fue planeada con la participación de la OTAN y los servicios especiales occidentales”, dijo sin ofrecer pruebas. “Sin su participación y apoyo directo, Kiev no se habría aventurado en territorio ruso”.
Las observaciones implicaron que la primera incursión reconocida de Ucrania en territorio soberano ruso conllevaba un alto riesgo de escalada.
Putin presidió una reunión del Consejo de Seguridad de Rusia, que incluyó a Patrushev, y dijo que la discusión se centraría en las “nuevas soluciones técnicas” que se están empleando en lo que Rusia llama su operación militar especial.
KREMLIN DICE QUE UCRANIA PAGARÁ POR LA PARTICIPACIÓN DE EE.UU.
“Los esfuerzos de Washington han creado todas las condiciones para que Ucrania pierda su soberanía y parte de sus territorios”, afirmó Patrushev.
Ucrania dijo el jueves que había instalado un comandante militar en el área que controlaba, incluso mientras Rusia intensificaba sus ofensivas en el este de Ucrania.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso dijo que había repelido una serie de ataques ucranianos a lo largo de la línea del frente de Kursk.
El gobernador de la región de Kursk, Alexei Smirnov, dijo que Ucrania había destruido un puente de carretera sobre el río Seym en el distrito de Glushkovsky de la región. La agencia de noticias estatal TASS, citando a funcionarios de seguridad rusos, dijo que eso podría obstaculizar la evacuación en curso de los aproximadamente 20.000 habitantes del distrito fronterizo.
Aunque el ataque ucraniano reveló debilidades en las defensas rusas y cambió la narrativa pública del conflicto, los funcionarios rusos dijeron que la “invasión terrorista” de Ucrania no cambiaría el curso de la guerra.
Rusia ha estado avanzando durante la mayor parte del año en el sector clave oriental del frente de 1.000 kilómetros (620 millas) y tiene una vasta superioridad numérica: controla el 18% de Ucrania.
Después de más de diez días de combates, Ucrania controla al menos 450 kilómetros cuadrados de territorio, es decir, menos del 0,003% de Rusia. Pero para Putin, la incursión cruza otra línea roja.
Una fuente rusa dijo a Reuters que la incursión podría envalentonar a los partidarios de una guerra más grande en Moscú, pero la elección de Putin puede no ser fácil.
Ha tratado de presentar la mayor guerra de Europa en siete décadas como una “operación militar especial” limitada que no necesita alterar la vida cotidiana rusa y como una lucha histórica con un Occidente que desprecia los intereses de Moscú y busca desmembrar a Rusia.
Estados Unidos, que ha dicho que no puede permitir que Putin gane la guerra de Ucrania, hasta ahora considera la incursión sorpresa como una medida de protección que justifica el uso de armamento estadounidense, dijeron funcionarios en Washington.
Pero también expresaron preocupación por las complicaciones a medida que las tropas ucranianas avanzan más en territorio enemigo.
Un funcionario estadounidense, hablando bajo condición de anonimato, dijo que si Ucrania comenzaba a tomar aldeas rusas y otros objetivos no militares usando armas y vehículos estadounidenses, podría ser visto como una exageración de los límites que Washington ha impuesto, precisamente para evitar cualquier percepción de un conflicto directo entre la OTAN y Rusia.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha publicado imágenes que, según dice, muestran un dron ruso destruyendo un vehículo de combate blindado Stryker de fabricación estadounidense en la región de Kursk.