Buenos Aires, 25 de marzo de 2025.- El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, será llevado a juicio oral acusado de abuso sexual simple en perjuicio de su exsecretaria privada, Melody Jacqueline Rakauskas, según resolvió el juez Fernando Mario Caunedo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 31. La decisión rechazó el pedido de sobreseimiento presentado por la defensa –avalado por la fiscalía– y aceptó la solicitud de la querella.
Además, Espinoza será juzgado por violar una orden de restricción dictada en junio de 2021, que le prohibía acercarse o comunicarse con Rakauskas. Según la acusación, el contacto se mantuvo a través de Gustavo Cilia, expareja de la víctima y allegado al intendente, quien habría presionado a Rakauskas para que retirara la denuncia.
Los hechos denunciados
Rakauskas acusó a Espinoza de haber abusado de ella el 10 de mayo de 2021, cuando el funcionario visitó su domicilio bajo el pretexto de tratar asuntos laborales. Según su testimonio, Espinoza le pidió un masaje debido a un dolor de cuello y, tras desabrocharse la camisa, ignoró sus negativas, la sujetó de las muñecas y la llevó a una habitación. Allí, habría intentado forzarla a mantener relaciones sexuales, aunque finalmente desistió y se retiró.
El juez destacó en su fallo que, si bien no hubo penetración, los actos denunciados –incluyendo tocamientos y frases como “Siempre te tuve ganas”– configuran el delito de abuso sexual simple, penado con hasta cuatro años de prisión.
Controversias y posturas enfrentadas
- La defensa y la fiscalía solicitaron el sobreseimiento, argumentando inconsistencias en el relato de Rakauskas y señalando que ella tenía antecedentes de grabar a hombres casados para extorsionarlos.
- El juez Caunedo rechazó estos argumentos, considerando que corresponde al juicio oral evaluar la credibilidad de los testimonios.
- La Cámara de Crimen ratificó el procesamiento y un embargo de $1.500.000 contra Espinoza.
Contexto adicional
Rakauskas denunció haber recibido amenazas de Espinoza (“Tenés los días contados”) tras hablar del caso con una compañera. Además, se mencionan denuncias previas de la víctima contra familiares y su expareja, aunque la Justicia las consideró irrelevantes para este caso.
Mientras avanza el juicio penal, también se tramita una causa civil, donde ya se agotó la instancia de mediación.