
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 20 de marzo de 2025.- Nery Persichini, economista especializado en finanzas y mercados, analizó este miércoles en CNN Primera Mañana la coyuntura económica actual, el acuerdo con el FMI y la posible eliminación del cepo cambiario. Durante la entrevista, abordó las exigencias del Fondo Monetario Internacional, como el ajuste fiscal, un tipo de cambio más flexible y una mayor autonomía del Banco Central. Persichini señaló que estas medidas buscan resolver problemas estructurales en la balanza de pagos, algo típico en acuerdos de facilidad extendida, como el que Argentina estaría por firmar en las próximas semanas.
El economista explicó que corregir la balanza de pagos requiere un tipo de cambio real más elevado, un superávit fiscal y una reconfiguración macroeconómica que el país no había logrado en años. Comparó a Argentina con naciones como Camerún y Egipto, que también han recurrido al FMI recientemente, destacando que Argentina ha sido el “mejor alumno” en términos fiscales durante el último año. Según Persichini, el país pasó de un déficit fiscal cercano al 3% a un superávit, lo que representa una mejora de más de cuatro puntos porcentuales en un año estable y sin crisis. Este desempeño, afirmó, posiciona favorablemente al país en las negociaciones con el FMI.
Respecto al aumento del dólar y del riesgo país, el experto atribuyó parte de la incertidumbre a la demora en concretar el acuerdo con el FMI. Aunque la economía ha mostrado cierta estabilidad, Persichini destacó que persisten desafíos clave, como la inflación y la recuperación de la actividad económica. Además, señaló que la situación cambiaria sigue siendo un punto crítico: las reservas comerciales de dólares han disminuido, y el déficit en la cuenta corriente se ha cubierto principalmente con endeudamiento del sector privado. Sin embargo, en enero este equilibrio se rompió, lo que generó mayor presión sobre el mercado.
Persichini advirtió que, sin la capacidad de generar dólares comerciales, Argentina seguirá dependiendo de los acreedores. Si estos reducen su apoyo, la acumulación de reservas se verá afectada. Sobre el posible acuerdo con el FMI, el economista mencionó que el monto que se apruebe podría sorprender o decepcionar al mercado. Si no se liberan entre 8.000 y 10.000 millones de dólares, el acuerdo podría no cumplir con las expectativas. Por otro lado, un monto mayor sería visto como positivo, aunque aún quedan detalles por resolver, como el tratamiento de las letras intransferibles y ciertas diferencias contables.
La urgencia del acuerdo con el FMI
En línea con la discusión sobre la necesidad de dólares, Gustavo Marangoni, analista político, afirmó este martes en Regreso CNN que la urgencia del acuerdo con el FMI no está relacionada con escándalos como el “Cryptogate” o el “Libragate”. “El apuro no pasa por eso, sino por el hecho sencillo de que las reservas del Banco Central son negativas. La urgencia del acuerdo con el Fondo es la urgencia de obtener dólares”, explicó Marangoni en diálogo con Mariana Arias y Pepe Gil Vidal.
Seguridad y movilizaciones
Consultado sobre los operativos de seguridad en las recientes marchas de jubilados, Marangoni cuestionó el discurso del gobierno en torno a las protestas. “La ministra (Patricia Bullrich) usa y abusa de determinados conceptos que son muy fuertes. Plantear que cualquier episodio de violencia es equiparable a la sedición parece un mecanismo algo exagerado”, sostuvo.
El analista agregó: “Lejos de mí validar cualquier hecho de violencia, pero desde que alguien arroje una piedra hasta decir que hay un propósito destituyente respecto al presidente de turno, creo que estamos entrando en un voltaje que no es aconsejable. Ni los funcionarios del poder Ejecutivo ni los representantes de la oposición deberían manejar ese discurso”.
El nerviosismo del mercado
Finalmente, Persichini destacó que el mercado está nervioso no solo por la falta de dólares, sino también por las incógnitas sobre el futuro del esquema cambiario y monetario una vez que el FMI apruebe el acuerdo. La reducción en la emisión de pesos y el aumento de las tasas de interés han generado tensiones, alimentando especulaciones sobre una posible devaluación y cambios en las tasas reales. Este contexto, sumado a un escenario internacional complejo, ha impactado en el comportamiento de los bonos en dólares y en la percepción general del clima de negocios en Argentina.