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La Haya, 20 de febrero de 2025 (EFE).- Europol ha emitido este jueves una alerta sobre el crecimiento de grupos en internet dedicados al “abuso infantil extremadamente violento” y advirtió de que estas comunidades buscan “normalizar la violencia y corromper a los menores”, difundiendo ideologías que inspiran “tiroteos masivos, atentados con bombas y otros crímenes”.
La agencia europea de coordinación policial emitió lo que se conoce como una “Notificación de Inteligencia” para llamar la atención sobre el aumento de estas comunidades que “reclutan tanto a agresores como a víctimas” a nivel global y funcionan como “sectas lideradas por figuras carismáticas que manipulan y engañan” a sus seguidores para “controlarlos”.
Material «extremadamente violento»
Estos grupos, explica la agencia, buscan “normalizar la violencia y corromper a menores, promoviendo el colapso de la sociedad moderna a través del terror, el caos y la violencia, y difundiendo ideologías que inspiran tiroteos masivos, atentados con bombas y otros crímenes”.
La jerarquía dentro de estos grupos se basa en “la cantidad de contenido compartido, donde los miembros más activos obtienen rangos más altos” y los participantes intercambian “material extremadamente violento, incluyendo imágenes sangrientas, crueldad animal, explotación sexual infantil y representaciones de asesinatos”, señaló la agencia, con sede en La Haya.
Los agresores recurren a “plataformas de videojuegos, servicios de transmisión en directo y redes sociales” para identificar y atraer a sus víctimas, y se enfocan en especial en jóvenes vulnerables, en particular menores de entre 8 y 17 años, incluidos los que pertenecen a la comunidad LGBTQ+, minorías raciales o jóvenes con problemas de salud mental.
Técnicas de manipulación
“En algunos casos, los perpetradores se infiltran en comunidades online de autoayuda o apoyo, donde las víctimas buscan ayuda para sus problemas emocionales”, señala.
Los líderes de estas comunidades usan “diversas tácticas de manipulación” para atraer a sus víctimas y “obligarlas a generar contenido sexual explícito, autolesionarse, dañar a otros o incluso cometer asesinatos”.
Entre los métodos identificados por Europol está lo que se conoce como el “love bombing”, que se explica como “expresiones extremas de cariño, comprensión y amabilidad para ganarse la confianza” del menor.
A medida que la relación avanza, recopilan datos personales sensibles de la víctima, antes de pasar a “la fase de explotación”, en la que obligan al menor a producir contenido sexual o cometer actos de violencia.
Si la víctima no quiere obedecer, los agresores “amenazan” con compartir las imágenes o videos explícitos con la familia, amigos o en redes sociales.
Prestar atención a la actividad de los menores en la red
“Una vez atrapados en esta red, los menores se vuelven aún más vulnerables. Detectar estas actividades criminales a tiempo es crucial”, alerta Europol, compartiendo una lista de “señales de alerta” en los niños.
La agencia pide prestar atención a, entre otros, sus actividades en internet (la interacción con contactos desconocidos, uso de comunicaciones encriptadas o exposición a contenido preocupante), aislamiento social, angustia emocional, interés en contenido violento o dañino, cambio en el lenguaje, uso de símbolos desconocidos y ocultamiento de signos físicos de daño.
“Los perpetradores propagan ideologías dañinas, a menudo dirigiéndose a nuestros jóvenes. Estas redes radicalizan en la sombra, incitándolos a llevar la violencia al mundo real. La concienciación es nuestra primera línea de defensa. Las familias, los educadores y las comunidades deben estar atentos y dotar a los jóvenes de habilidades de pensamiento crítico para resistir la manipulación en línea”, añadió la directora de Europol, Catherine De Bolle.
De Bolle consideró “clave” la cooperación internacional e instó a seguir compartiendo información y responsabilizando a los perpetradores, para poder “combatir estas peligrosas comunidades y proteger a las futuras generaciones del extremismo y el crimen».