Washington, EE. UU., 14 de febrero de 2025 (AP) — Un juez federal ordenó al gobierno del presidente Donald Trump que levante temporalmente una congelación de fondos que ha paralizado la ayuda humanitaria y el trabajo de desarrollo de Estados Unidos en todo el mundo, y ha fijado un plazo de cinco días para que el gobierno demuestre que está cumpliendo.
El fallo del juez emitido a última hora del jueves citó la devastación financiera que el corte de pagos casi de la noche a la mañana ha causado a los proveedores y organizaciones sin fines de lucro que llevan a cabo gran parte de la ayuda estadounidense en el exterior.
El fallo fue el primero en impugnar la congelación de fondos de la administración republicana. Se produce en medio de un creciente número de demandas por parte de grupos de empleados gubernamentales, grupos de ayuda y proveedores gubernamentales que piden a los tribunales que desmantelen rápidamente la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la asistencia exterior estadounidense en general.
Trump y su asistente Elon Musk dicen que la agencia de ayuda de seis décadas de existencia y gran parte de la asistencia extranjera en general no están en línea con la agenda del presidente republicano.
Los funcionarios de la administración “no han ofrecido ninguna explicación de por qué una suspensión general de toda la ayuda extranjera asignada por el Congreso, que desencadenó una onda expansiva y trastocó” los contratos con miles de grupos sin fines de lucro, empresas y otros, “fue un precursor racional para revisar los programas”, dijo el juez Amir H. Ali en su fallo.
Contratistas, agricultores y proveedores de Estados Unidos y de todo el mundo dicen que la congelación de fondos de la administración Trump les ha dejado sin pagar cientos de millones de dólares por trabajo ya realizado, los ha obligado a despedir personal y está colocando rápidamente a muchos cerca del punto del colapso financiero.
Los agricultores y otros proveedores y contratistas describen grandes cantidades de ayuda alimentaria no entregada que se pudre en los puertos y otra ayuda no entregada que corre el riesgo de ser robada.
El juez ordenó a la administración que notificara a todas las organizaciones que tenían un contrato de ayuda exterior con el gobierno federal sobre su estadía temporal. Fijó como plazo el martes para que la administración demostrara que lo había hecho y que estaba cumpliendo con la orden.
No hubo una respuesta pública inmediata por parte de la administración Trump.
El juez emitió la orden temporal en Estados Unidos en una demanda presentada por dos organizaciones, la AIDS Vaccine Advocacy Coalition y el Global Health Council, que representan a organizaciones de salud que reciben fondos estadounidenses para trabajar en el extranjero.
En su orden, el juez señaló que la administración Trump argumentó que tenía que cerrar la financiación de los miles de programas de ayuda de USAID en el extranjero para realizar una revisión exhaustiva de cada programa y determinar si debía eliminarse.
Sin embargo, los abogados de la administración no lograron demostrar que tenían una “razón racional para ignorar… las innumerables empresas pequeñas y grandes que tendrían que cerrar programas o cerrar sus negocios por completo”, agregó el juez.
El fallo también prohíbe al secretario de Estado, Marco Rubio, y a otros funcionarios de Trump hacer cumplir las órdenes de suspensión de trabajos que la administración Trump y Musk han enviado a las empresas y organizaciones que ejecutan órdenes de ayuda extranjera.
El juez también rechazó el argumento de la administración Trump de que estaba amortiguando el impacto de la congelación de fondos, ofreciendo exenciones para permitir que los fondos siguieran fluyendo hacia algunos socios de ayuda. Citó testimonios de que todavía no existía un sistema de exenciones de ese tipo y de que el sistema de pagos en línea de USAID ya no funcionaba.
En un fallo separado en otra demanda el jueves, un juez dijo que su bloqueo temporal a una orden de la administración Trump que retiraría a todos, excepto a una fracción, del personal de USAID en todo el mundo del trabajo permanecería vigente al menos una semana más.
El juez de distrito de Estados Unidos Carl Nichols interrogó al gobierno sobre cómo podría garantizar la seguridad de los trabajadores humanitarios que se encuentran en el extranjero durante sus licencias, a pesar del desmantelamiento de la USAID por parte de la administración. Cuando un abogado del Departamento de Justicia no pudo proporcionar planes detallados, el juez le pidió que presentara documentos judiciales después de la audiencia.
Los empleados de USAID que hasta hace poco estaban destinados en el Congo habían presentado declaraciones juradas para la demanda, describiendo que la agencia de ayuda prácticamente los abandonó cuando estallaron los saqueos y la violencia política en la capital del Congo el mes pasado, obligándolos a evacuar con sus familias.