Corea del Sur: Fracasa intento de detención del presidente destituido

Partidarios del presidente surcoreano destituido Yoon Suk Yeol se manifiestan tras conocerse la noticia de que un tribunal emitió órdenes de detención contra Yoon, cerca de la residencia presidencial en Seúl, el martes 31 de diciembtre de 2024 (Foto AP/Lee Jin-man)

SEÚL, Corea del Sur, 3 de enero de 2025 (AP).- Los investigadores surcoreanos abandonaron el viernes la residencia oficial del presidente destituido Yoon Suk Yeol tras un enfrentamiento de casi seis horas durante el cual el mandatario desafió el intento de detenerlo. Se trata del último enfrentamiento en una crisis política que ha paralizado la política surcoreana y ha visto a dos jefes de Estado enjuiciados en menos de un mes.

La agencia anticorrupción del país dijo que retiró a sus investigadores después de que el servicio de seguridad presidencial les impidió ingresar a la residencia de Yoon durante horas, debido a preocupaciones sobre su seguridad.

La agencia dijo que sus investigadores, superados en número, tuvieron varios enfrentamientos con las fuerzas de seguridad presidenciales y expresaron “un profundo pesar por la actitud del sospechoso, que no cumplió con el proceso legal”.

Según la agencia, detener a Yoon será “prácticamente imposible” mientras esté protegido por el servicio de seguridad presidencial. La agencia planea “exigir firmemente” que el líder interino del país, el viceprimer ministro Choi Sang-mok, ordene al servicio que cumpla con la ejecución de la orden de detención.

Fuera de la residencia, un gran grupo de manifestantes pro-Yoon desafiaron temperaturas gélidas durante horas, ondeando banderas de Corea del Sur y Estados Unidos mientras coreaban consignas prometiendo protegerlo.

La Agencia Nacional de Policía dijo que planeaba investigar al jefe y subdirectores del servicio de seguridad presidencial bajo sospecha de obstrucción del deber oficial y los citó para interrogarlos el sábado.

Yoon, un ex fiscal, ha resistido los intentos de los investigadores de interrogarlo durante semanas. La última vez que se sabe que salió de la residencia fue el 12 de diciembre, cuando fue a la cercana oficina presidencial para hacer una declaración televisada a la nación, en la que manifestó desafiante que luchará contra los intentos de derrocarlo.

Los investigadores de la agencia anticorrupción del país están sopesando los cargos de rebelión después de que Yoon, aparentemente frustrado porque sus políticas fueron bloqueadas por un parlamento dominado por la oposición, declaró la ley marcial el 3 de diciembre y envió tropas para rodear la Asamblea Nacional.

El Parlamento revocó la declaración en cuestión de horas en una votación unánime y destituyó a Yoon el 14 de diciembre, acusándolo de rebelión, mientras que las autoridades anticorrupción de Corea del Sur y los fiscales abrieron investigaciones separadas sobre los hechos.

Un tribunal de Seúl emitió el martes una orden de detención contra Yoon y una orden separada para registrar su residencia, pero hacerlas cumplir es complicado mientras permanezca en su residencia oficial.

Los abogados de Yoon, que presentaron una impugnación a la orden el jueves, dicen que no se puede hacer cumplir en su residencia debido a una ley que protege los lugares potencialmente vinculados a secretos militares de ser registrados sin el consentimiento de la persona a cargo.

La oficina dijo que analizará otras medidas, pero no dijo de inmediato si intentará detener a Yoon nuevamente. La orden de detención es válida por una semana.

Los abogados de Yoon también han argumentado que la Oficina de Investigación de la Corrupción para Funcionarios de Alto Rango, que está llevando a cabo una investigación conjunta con investigadores policiales y militares, carece de autoridad para investigar los cargos de rebelión. Dijeron que los agentes de policía no tienen autoridad legal para ayudar a detener a Yoon y podrían ser arrestados por el “servicio de seguridad presidencial o por cualquier ciudadano”. No dieron más detalles sobre la afirmación.

Si los investigadores logran detener a Yoon, probablemente pedirán permiso a un tribunal para realizar un arresto formal. De lo contrario, será liberado después de 48 horas.

Durante una sesión informativa con periodistas, un funcionario de la agencia anticorrupción dijo que sus investigadores pudieron acercarse a 200 metros de la residencia de Yoon, pero que una barricada compuesta por unos 10 vehículos y aproximadamente 200 miembros de las fuerzas de seguridad presidenciales y tropas los detuvo. El funcionario, que habló bajo condición de anonimato según las normas del departamento, dijo que finalmente se permitió que tres de sus fiscales se acercaran al edificio, pero no pudieron confirmar si Yoon estaba dentro.

Si bien la ley de seguridad presidencial establece la protección de Yoon, no autoriza al servicio de seguridad presidencial a bloquear las detenciones ordenadas por el tribunal, lo que equivaldría a una infracción de la autoridad judicial, dijo Park Seong-bae, un abogado especializado en derecho penal. Si bien el presidente tiene inmunidad frente a procesos judiciales durante su mandato, la protección no se extiende a las acusaciones de rebelión o traición.

“Existe una gran posibilidad de que el acto de bloquear la ejecución de una orden de detención constituya una obstrucción del deber oficial”, dijo.

La ley que exige el consentimiento de la persona a cargo para realizar registros en lugares con posibles secretos militares podría seguir obstaculizando la detención de Yoon. Los tribunales suelen exigir a los agentes de la ley que obtengan órdenes de registro junto con las órdenes de detención en caso de que necesiten registrar el lugar para localizar al sospechoso, que es también lo que hizo la agencia anticorrupción en su búsqueda de Yoon.

Es poco probable que la aprobación venga del líder interino del país, Choi, ya que sería difícil verlo como la persona a cargo de la residencia de Yoon, dijo Park.

Park Chan-dae, líder del partido de oposición liberal Partido Democrático, calificó de lamentable la retirada de la agencia anticorrupción e instó a la agencia a hacer otro intento para detener a Yoon el viernes.

Kwon Young-se, quien encabeza el comité de liderazgo de emergencia del conservador Partido del Poder Popular de Yoon, calificó el esfuerzo de la agencia para detener a Yoon como “altamente injusto y extremadamente inapropiado”, diciendo que no hay riesgo de que Yoon intente huir o destruir evidencia.

Miles de agentes de policía se congregaron el viernes en la residencia de Yoon y formaron un perímetro alrededor de un grupo cada vez mayor de manifestantes a favor de Yoon que desafiaron las gélidas temperaturas durante horas, ondeando banderas de Corea del Sur y Estados Unidos mientras gritaban consignas en las que prometían protegerlo. No hubo informes inmediatos de enfrentamientos importantes fuera de la residencia.

El ministro de Defensa de Yoon, el jefe de policía y varios comandantes militares de alto rango ya han sido arrestados por su papel en el período de la ley marcial.

Los poderes presidenciales de Yoon han quedado suspendidos desde que la Asamblea Nacional votó a favor de destituirlo el 14 de diciembre. El destino de Yoon ahora está en manos del Tribunal Constitucional, que ha comenzado a deliberar sobre si mantener el proceso de destitución y destituir formalmente a Yoon de su cargo o restituirlo. Al menos seis jueces de los nueve miembros del Tribunal Constitucional deben votar a favor de destituirlo de su cargo.

La Asamblea Nacional votó la semana pasada para destituir al primer ministro Han Duck-soo , quien se convirtió en presidente interino después de que se suspendieran los poderes de Yoon, por su renuencia a llenar tres vacantes en el Tribunal Constitucional antes de que el tribunal revisara el caso de Yoon.

Ante una creciente presión, el nuevo presidente interino, Choi, nombró a dos nuevos jueces el martes, lo que podría aumentar las posibilidades de que el tribunal confirme el impeachment de Yoon.