NUEVA YORK, EE. UU., 26 septiembre 2024.- Soborno, fraude electrónico y aceptación de contribuciones indebidas a su campaña son los cargos federales que enfrenta el alcalde de Nueva York, Eric Adams.
Esta mañana se hizo pública la acusación federal de cinco cargos en 57 páginas, firmada por el fiscal federal Damian Williams. Adams está acusado específicamente de soborno, solicitud de contribuciones ilegales a la campaña extranjera, fraude electrónico y conspiración para cometer fraude electrónico, cargos que lo exponen a una pena de prisión significativa si es condenado, comentó ABC News.
Esta mañana el alcalde demócrata celebró una conferencia de prensa poco después de que se hiciera pública la acusación y su residencia oficial fuese allanada por agentes federales, y volvió a insistir en que se mantendrá en el cargo, algo que luce cada vez más improbable.
El alcalde está acusado de aceptar contribuciones ilegales a la campaña y sobornos de ciudadanos extranjeros a cambio de favores que incluyen haber supuestamente ayudado a funcionarios turcos a obtener aprobaciones bomberiles (FDNY) de seguridad contra incendios para un nuevo edificio diplomático en Manhattan.
La presunta conducta es anterior a la gestión de Adams como alcalde -cargo que asumió en 2022- y data de su época como presidente del condado Brooklyn (2014-2021). La acusación incluye fotos de habitaciones de hotel de lujo y otros beneficios que supuestamente recibió el alcalde, como vuelos gratis al exterior en clase ejecutiva.
“No nos sorprende”, dijo Adams en su rueda de prensa de hoy, mientras pedía a los neoyorquinos que esperaran para escuchar su defensa. Su abogado, Alex Spiro, publicó una declaración irónica:
“Sabemos desde hace tiempo que intentarían encontrar una forma de presentar una demanda contra el alcalde Adams. Ayer hubo más filtraciones indebidas. Hoy nos enviaron una citación por correo electrónico (y crearon el espectáculo de una redada falsa). Y muy pronto, sin duda, celebrarán una conferencia de prensa de una hora en lugar de comparecer ante un tribunal abierto. Los jueces federales critican (a los fiscales) todo el tiempo por manipular el discurso frente a las cámaras y contaminar a los jurados. Pero siguen haciéndolo porque no pueden evitarlo, el centro de atención es demasiado emocionante. Los veremos en el tribunal”.
Esta mañana los federales que allanaron Gracie Mansion confiscaron el teléfono de Adams, pocas horas antes de que se hiciera pública la acusación anunciada anoche, cuando se convirtió en el primer alcalde de NYC en ejercicio en ser acusado en una investigación federal.
En la historia de Nueva York, la ciudad más poblada de EE.UU., dos alcaldes han dimitido: Jimmy Walker en 1932 y William O’Dwyer en 1950, ambos demócratas que salieron tras escándalos de corrupción.
En una declaración leída en video emitida anoche horas después de ser acusado, Adams ratificó que no renunciaría y afirmó que estaba siendo perseguido por el gobierno federal por las tensiones sobre la crisis migratoria de la ciudad de Nueva York que ha marcado su gestión desde la primavera de 2022.
Si Adams no renuncia, la carta orgánica de la ciudad otorga a la gobernadora Kathy Hochul el poder de destituirlo. Otra opción legal para removerlo del cargo es convocando un “comité de incapacidad”. En cualquier virtual salida de Adams, el Defensor del Pueblo, Jumaane Williams, asumiría a la alcaldía de manera temporal y tendría que convocar a nuevas elecciones.
La última vez que Nueva York vivió un sismo política de esta magnitud fue en el verano de 2021, cuando el poderoso gobernador (D) Andrew Cuomo fue forzado a renunciar bajo acusaciones de acoso sexual, siendo sustituido por su vicegobernadora Hochul, la primera mujer en la historia en liderar el poder ejecutivo estatal.
Horas antes de que se hiciera pública la acusación anoche Adams había asistido a una recepción con el presidente Joe Biden y otros líderes mundiales que se encuentran en Manhattan por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). “El presidente Biden regresó a la Casa Blanca desde la ciudad de Nueva York. Cuando se iba, los periodistas le gritaron preguntas sobre la acusación contra el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, pero no está claro si las escuchó”, reseñó News Nation.
Adams, de 64 años, ha insistido en que no renunciará, un pedido que ya había crecido en las últimas semanas por las investigaciones del FBI a varios de sus funcionarios y/o la dimisión de otros; y se comprometió a “luchar contra estas injusticias con cada gramo de mi fuerza y espíritu”.
“Solicitaré un juicio inmediato para que los neoyorquinos puedan escuchar la verdad. Los neoyorquinos conocen mi historia. Saben de dónde vengo. He estado luchando contra la injusticia toda mi vida. “Esa lucha ha continuado como su alcalde”.
“Cuando el gobierno federal no hizo nada mientras sus políticas de inmigración fallidas sobrecargaban nuestro sistema de refugios sin ningún alivio, puse a la gente de Nueva York por delante del partido y la política”, insistió el alcalde en su video anoche.
No está claro cómo se relaciona la acusación de Adams con las redadas del 4 de septiembre que apuntaron a varios funcionarios de alto perfil del gobierno municipal, colocando al Ayuntamiento en una crisis institucional. El 12 de septiembre dimitió Edward Cabán, el primer comisionado latino NYPD, en medio de la investigación federal del FBI.
La crisis migratoria ha marcado la gestión de Adams, en medio de una batalla política nacional entre demócratas y republicanos. En septiembre del año pasado el alcalde declaró que la llegada masiva de inmigrantes “destruirá” a la ciudad, alegando falta de recursos y apoyo del gobierno de Biden.
Dos meses después, en noviembre, le surgió otra crisis: Adams tuvo que interrumpir un viaje a Washington DC y volver a Nueva York al trascender que agentes del FBI habían confiscado sus dispositivos electrónicos, incluyendo su iPad y teléfono. Esos equipos luego fueron retornados.
Días después Adams también fue demandado por Lorna Beach-Mahura por un supuesto abuso sexual cometido hace 31 años, cuando él era oficial de NYPD.
Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.
Con eldiariony