TALLINN, Estonia, 4 mayo 2023 (AP).- Según cuentan las autoridades rusas, dos drones ucranianos volaron hacia el corazón de Moscú al amparo de la oscuridad, llegando al Kremlin antes de ser derribados en el último minuto.
Una nube de preguntas se cierne sobre el reclamo.
¿Por qué el anuncio del Kremlin se produjo unas 12 horas después del supuesto incidente? ¿Por qué no surgieron informes de explosiones antes del anuncio sobre las aplicaciones de mensajería que siguen llenas de conversaciones a pesar de la represión de Rusia contra los medios y las críticas a la guerra en Ucrania? ¿Por qué los videos de los supuestos ataques no aparecieron hasta después del anuncio? ¿Por qué no se han verificado las imágenes?
Un ataque con drones en el Kremlin sería la penetración más severa del espacio aéreo ruso desde que el adolescente alemán Matthias Rust aterrizó su pequeño avión monomotor en las afueras de la Plaza Roja en 1987. Anunciar el ataque, o incluso fingir, corre el riesgo de que Rusia socave a sus ciudadanos. ‘ confianza en sus frecuentes afirmaciones de superioridad militar.
A esa humillación se suma el hecho de que el incidente ocurrió menos de una semana antes del Día de la Victoria, la fiesta militar más importante de Rusia. En algunos de los videos del presunto ataque, se pueden ver de manera prominente las gradas decoradas y la tribuna para el desfile militar ritual de la Plaza Roja del día.
Para el presidente Vladimir Putin, la confesión de que los drones ucranianos llegaron al Kremlin podría ser una justificación para un brutal aumento de los ataques contra Ucrania. Los funcionarios rusos afirman persistentemente (evidencia repetida de lo contrario) que los militares solo persiguen objetivos militares.
Ya se están produciendo severas represalias, incluidas amenazas dirigidas específicamente al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, quien negó haber atacado al Kremlin.
“Después del acto terrorista de hoy, no queda otra variante que la eliminación física de Zelenskyy y su camarilla”, dijo el ex presidente ruso y vicepresidente del consejo de seguridad ruso, Dmitry Medvedev,
El presidente de la poderosa cámara baja del parlamento, Vyacheslav Volodin, comparó al gobierno ucraniano con el terrorista Estado Islámico y dijo que exigirá “el uso de armas capaces de destruirlo”.
La doctrina nuclear de Rusia dice que el país puede usar armas nucleares si sufre un ataque nuclear o si enfrenta un ataque con armas convencionales que amenaza “la existencia misma” del estado ruso. Occidente ha acusado a Putin de ruido de sables nucleares durante la guerra de Ucrania.
“No vas a decir, ‘Ahora que ha habido un ataque con un pequeño dron, ahora podemos volvernos nucleares’”, dijo.
El comentarista Abbas Gallyamov, ex redactor de discursos de Putin que huyó del país, también planteó dudas.
“Si los drones enemigos llegan al Kremlin, significa que cualquier otro objeto en el territorio de la parte europea de Rusia está generalmente indefenso”, dijo. “Por lo tanto, no creo que esto haya sido una provocación concebida por el Kremlin para influir en la opinión pública”.
Si Ucrania realmente hubiera atacado, “considéralo un ataque de actuación, una demostración de capacidad y una declaración de intenciones: no creas que Moscú es seguro”, dijo Mark Galeotti, analista militar y de seguridad ruso en el University College de Londres.
Menos claro, dijo en Twitter, “es si sacude los nervios de los rusos o los enoja”.
Los nervios de los rusos ya se han desgastado por los ataques, probablemente de Ucrania o de oponentes domésticos, que han aumentado considerablemente en las últimas semanas.
Dos trenes de carga descarrilaron esta semana en explosiones de bombas en la región de Bryansk que limita con Ucrania. En particular, las autoridades de la región no culparon a Ucrania, lo que podría ser un intento de blanquear las capacidades de sabotaje de Ucrania.
Pero las autoridades de Bryansk afirmaron en marzo que dos personas fueron asesinadas a tiros cuando presuntos saboteadores ucranianos penetraron en la región. La región también se ha visto afectada por bombardeos transfronterizos esporádicos, incluido uno que mató a cuatro personas en abril.
Según los informes, los drones ucranianos han penetrado profundamente en Rusia varias veces. En diciembre, Rusia afirmó haber derribado drones en aeródromos en las regiones de Saratov y Ryazan. Se informó que tres soldados murieron en el ataque en Saratov, que tuvo como objetivo un importante aeródromo militar.
Anteriormente, Rusia informó que había derribado un dron ucraniano que tenía como objetivo la sede de su Flota del Mar Negro en Sebastopol, en la Crimea anexada a Rusia.
Además, dos destacados partidarios de la guerra de Rusia en Ucrania han sido asesinados en su tierra natal. Darya Dugina, comentarista de un canal de televisión nacionalista, murió en un atentado con coche bomba en las afueras de Moscú que las autoridades atribuyeron a Ucrania. Y las autoridades dijeron que la inteligencia ucraniana estuvo detrás del asesinato del destacado bloguero pro-guerra Vladlen Tatarsky, quien murió en abril cuando explotó una bomba dentro de una estatuilla que le entregaron en una fiesta.