“¿Qué posibilidad tenemos nosotros de pagar U$S 18 mil millones de dólares el año que viene? Ninguna. La deuda que heredamos en los términos en los que está es impagable”, sostuvo.
CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, 28 MAR 2021 — El presidente Alberto Fernández dijo este domingo que la deuda de Argentina con el Fondo Monetario Internacional “es impagable” en las condiciones en las que fue pactada, por lo que su gobierno negocia para cambiar los términos.
Fernández aseguró que “no existe una contradicción” entre lo que plantean la vicepresidenta Cristina Kirchner y el ministro de Economía Martín Guzmán respecto a la negociación con el Fondo Monetario Internacional y la deuda de más de U$S 44 mil millones que la Argentina tiene con el organismo de crédito multilateral.
“No existe la contradicción entre Guzmán y Cristina. Es una contradicción que nos quieren imponer por el deseo de dividirnos. A lo sumo hay un modo diferente de decir las cosas. ¿Qué posibilidad tenemos nosotros de pagar U$S 18 mil millones de dólares el año que viene? Ninguna. Lo que estamos diciendo todos es que la deuda que heredamos en los términos en los que está es impagable”, sostuvo Fernández en declaraciones radiales.
Y agregó: “Estamos negociando con el Fondo para obtener las mejores ventajas. Hemos logrado cosas inusuales para el Fondo: que el Fondo haya hablado de que las deudas deben ser sostenibles. Ahora, en el último viaje de Martín, el FMI admitió algo impensado: que la inflación reconoce múltiples causas que la determinan. Eso es inusual porque el Fondo siempre dijo que la inflación es determinada por el déficit fiscal y la emisión monetaria”.
Además, se refirió a una discusión interna que existe dentro del Gobierno respecto a la necesidad de ampliar el gasto en el año electoral y abandonar las restricciones fiscales.
“El kirchnerismo que yo aprendí, que fue el que aprendí al lado de Néstor, era el que se irritaba con el déficit fiscal y consideraba que era totalmente nocivo. Razonablemente lo es: gastar lo que no tenés es nocivo”, indicó el primer mandatario.
En ese sentido, indicó que durante la pandemia el país tuvo “un déficit fiscal importante”, por lo que es necesario “ir reduciéndolo hasta acercarnos al equilibrio fiscal”.
“Nuestro deseo es poder pagar en condiciones de desarrollo, de crecimiento. Nadie ha hablado de no pagar”, manifestó.
Asimismo, el jefe de Estado fue consultado por los aumentos de precios, sobre lo que dijo “hay un grupo de intermediarios que va torciendo precios y acumulando costos”.
“Es muy impresionante como los precios se tergiversan. La Ley de Góndolas la reglamentamos. Hay un problema de cultura cambiaria”, subrayó.
En tanto, dijo que controlar los aumentos “no es fácil” porque “en la cadena de distribución de alimentos o de materiales de construcción intervienen un sinfín de empresistas y personas, empresas de transportes”.
“Sobre los precios trabajan muchos Ministerios y Secretarías. Inciden los precios de importaciones y los que se exportan”, señaló.
La semana pasada, el ministro de Economía, Martín Guzmán, viajó a Washington para reunirse con autoridades del FMI. En un comunicado al término de la visita, el organismo multilateral señaló que hubo un “entendimiento común respecto a la necesidad de garantizar la sostenibilidad macroeconómica y de salvaguardar la recuperación post-COVID en curso”.
Argentina, que recibió 44.000 millones de dólares del FMI en el marco de un programa por 57.000 millones suscripto en 2018 durante el gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), busca un nuevo acuerdo crediticio con el organismo financiero.
“El tema no es no pagar sino que podamos obtener un acuerdo que nos permita sostener el plan económico que tenemos, de desarrollo y crecimiento y sin olvidar a ese 40% de la población que está por debajo de la pobreza”, había dicho Fernández el sábado en otras declaraciones al canal C5N.
Fernández celebró haber “logrado que el Fondo diga cosas inusuales, por ejemplo que las deudas deben ser sostenibles. Está diciendo que los países tienen que poder pagar su deuda sin postergar su desarrollo”.
La economía del país sudamericano, que sufre su tercer año de recesión, cayó 9,9% en 2020 en el contexto de la pandemia. Tuvo una inflación de 36,1%, índice menor al 53,8% de 2019. Para 2021 el gobierno prevé un incremento de precios de 29% pero las últimas expectativas del mercado de febrero arrojaron una inflación estimada en 48,1% este año.
Según Fernández, el FMI reconoció que la inflación argentina, la segunda más alta del mundo, es multicausal. “Está determinada por un sinfín de causas que van desde la emisión monetaria y el déficit fiscal, pasando por la especulación de muchos y hasta una suerte de psicosis argentina”, afirmó el mandatario.
Con informaciòn de France24, con AFP y NA