Sindicatos de salud de Brasil denuncian a Jair Bolsonaro ante la Corte Penal Internacional

28 JUL 2020 – Alrededor de un millón de trabajadores, agrupados en la red brasileña Unisaúde, respaldan una denuncia presentada ante la Corte Penal Internacional en la que responsabilizan al jefe de Estado brasileño de poner en peligro la vida de los ciudadanos con su manejo de la pandemia de coronavirus.

La demanda insta a que la Corte Penal Internacional, con sede en La Haya, Países Bajos, inicie una investigación por la gestión que ha realizado el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro de la pandemia de coronavirus en el país sudamericano.

De acuerdo con un comunicado emitido por la red de sindicatos Unisaúde, esta sería la primera demanda que se presenta contra un Gobierno debido al contagio y muerte a gran escala a causa de fallas en el sistema de salud pública de Brasil.

“Presentar un caso ante la Corte Penal Internacional es una medida drástica, pero los brasileños enfrentan una situación extremadamente grave y peligrosa creada por las decisiones deliberadas de Bolsonaro”, dijo Marcio Monzane, secretario regional de UNI Américas, organización que encabezó la demanda, a través de un comunicado.

Por otro lado, Monzane señala que no sólo son los trabajadores de la salud los más expuestos, también hay grupos y poblaciones en riesgo por la omisión de las autoridades.

“Brasil es el país con más trabajadores de la salud muertos con 500 trabajadores que perdieron la vida por culpa del Covid. Pero hay un proceso de exposición que pasa por la falta de equipamiento y protección del lugar de trabajo, agregó Monzane durante una conversación con France 24.

Adicionalmente, los sindicatos señalan que el mandatario ha “perpetuado los riesgos de contagio por Covid-19 al organizar reuniones con sus partidarios, acercarse a ellos sin mascarilla y promover un tratamiento médico muy cuestionable con hidroxicloroquina”, el cual no ha mostrado eficacia contra la enfermedad tras varios estudios científicos.

La demanda se sustenta en los principios del Estatuto de Roma, que en el año 1998 estableció cuatro crímenes internacionales principales: genocidio, crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y el crimen de agresión.

En el documento presentado, se acusa a Bolsonaro de cometer crímenes contra la humanidad al negarse a tomar medidas necesarias para proteger a los ciudadanos durante el brote y al no cumplir con la protección al pueblo brasileño que estipula la Constitución.

La federación sindical UNI Global Union cita a Ana Paula Gonçalves Maia, técnica de enfermería y delegada del Sindicato de Empleados en Establecimientos de Servicios de Salud en Belo Horizonte, quien espera que con la denuncia en la CPI se preste más atención a los trabajadores de la salud, especialmente los profesionales de enfermería, “porque estamos en un campo de batalla donde no sabemos si viviremos o moriremos”.

Según cifras del Consejo Federal de Enfermería de Brasil al menos 100.000 enfermeras, técnicos de enfermería y auxiliares de enfermería han contraído el virus, aunque Monzane señala que la cifra total se eleva a 170.000.

Brasil es la segunda nación más afectada por el brote de Covid-19, solamente superada por Estados Unidos, con más de 2,4 millones de contagios y al menos 87.000 muertos, según cifras oficiales.

Bolsonaro modera su discurso tras superar el Covid-19

La noticia sobre la denuncia se presenta días después de que Jair Bolsonaro anunció haber dado negativo a un tercer test para descartar la presencia del virus en su organismo luego de haber contraído la enfermedad.

Bolsonaro, al igual que otros líderes mundiales como el presidente estadounidense Donald Trump, minimizó en un principio el impacto de la pandemia y alcanzó a describir la enfermedad como una “gripecita”, en un discurso centrado en evitar el cierre total de la economía en el país.

El 27 de julio, el jefe de Estado retomó actividades oficiales mostrando un discurso más moderado que antes del contagio. En sus primeras palabras, mostró preocupación por los datos de empleo en la nación. “Acabaron con el empleo en Brasil y tendremos que resolver eso”, dijo.

Por otro lado, se observó cuidadoso de acercarse a las personas, algo que no ocurría antes de anunciar que había contraído la enfermedad.