ARGENTINA: Aeropuertos Argentina 2000 refinancia deudas bancarias por US$ 120 millones. Longvie, Grimoldi y Ribeiro en default

El acuerdo suscripto se suma a la operación en curso para canjear bonos por US$ 367 millones con vencimiento en 2027, por nuevos títulos con el mismo plazo, pero que contemplan diferir los pagos de intereses. La compañía de electrodomésticos Longvie informó este jueves que no pagará una cuota de sus obligaciones negociables (bonos empresariales) que vence esta semana y así entró en default. Se suma a los casos de la cadena de zapaterías Grimoldi y el retail Ribeiro, que en las semanas anteriores también ingresaron en cesación de pagos.

CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, 9 MAY 2020 – Aeropuertos Argentina 2000 (AA2000) firmó con un banco extranjero y tres locales un Acuerdo Marco de Refinanciación, que incluye los términos y condiciones generales para diferir los pagos de capital que vencen en agosto y noviembre próximos, correspondientes a dos préstamos por una suma total de US$ 120 millones concedidos en agosto del año pasado.

El acuerdo suscripto por AA2000, una unidad de la Corporación América Airports S.A. (del grupo Eurnekian), se suma a la operación en curso para canjear bonos por US$ 367 millones con vencimiento en 2027, por nuevos títulos con el mismo plazo, pero que contemplan diferir los pagos de intereses.

Tanto el Acuerdo Marco de Refinanciación como la oferta de canje se concretaron en el marco de la pandemia de Covid-19, “que ha afectado severamente el tráfico aéreo nacional e internacional y, por lo tanto, las necesidades de financiación de AA2000”, indicaron los estudios jurídicos asesores, Marval O’Farrell Mairal y Bomchil.

Aeropuertos Argentina 2000, recordaron, “es el mayor concesionario aeroportuario en la Argentina desde 1998 y cuenta con el derecho, bajo un contrato de concesión con el Estado argentino, de usar, operar y gestionar 35 de los 54 aeropuertos del sistema aeroportuario nacional, incluyendo dos de los aeropuertos de mayor tránsito del país”.

El primero de los créditos cuyas cuotas de capital se acordó refinanciar fue otorgado por el Citibank NA, a través de su International Banking Facility, en su carácter de prestamista y coorganizador, por US$ 35 millones.

Esa operación se había pactado por un plazo de tres años, a una tasa variable equivalente a la tasa Libor (interbancaria de Londres) más un margen de 5,5%.

Por otro lado, AA2000 acordó refinanciar un préstamo que las filiales locales del Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), el Banco de Galicia y el Banco Santander otorgaron en su carácter de financistas y coorganizadores por US$ 35 millones, US$ 25 millones y US$ 25 millones, respectivamente.

En este caso, el crédito se había acordado también por un plazo de tres años, pero a una tasa nominal anual de 9,75%.

El Acuerdo Marco de Refinanciación fue celebrado en el marco de la oferta de canje de las obligaciones negociables emitidas por AA2000 en 2017 por US$ 400 millones, a una tasa del 6,875% anual.

La empresa es fabricante de electrodomésticos desde 1918 . Según indica su página Web, da empleo a más de 800 personas en sus plantas en Buenos Aires, Paraná y San Fernando de Catamarca en las cuales produce lavarropas, lavasecarropas, cocinas, hornos, anafes, calefones, termotanques y calefactores para el mercado interno e internacional.

El caso de Longvie se suma a los de Ribeiro y Grimoldi, que también anunciaron que no pagarán su deuda durante la cuarentena total y entraron en default. Otras compañías con obligaciones en dólares, como Aeropuertos Argentina 2000, Raghsa y MSU Energy, lanzaron ofertas de canje para reestructurar su deuda.

Ese canje, para ser válido, debe lograr que lo acepten los tenedores de al menos 80% del capital pendiente, y la fecha límite prevista es el próximo día 18 de este mes.

AA2000 ya comunicó a inversionistas que tenedores que poseen cerca de US$ 341 millones de esos títulos con vencimiento en 2027 acordaron recibir nuevos bonos con una estructura de pago modificada, de aproximadamente 85% del monto principal original.

El default de Longvie

Longvie informó este jueves que no pagará una cuota de sus obligaciones negociables (bonos empresariales) que vence esta semana y así entró en default. Se suma a los casos de la cadena de zapaterías Grimoldi y el retail Ribeiro, que en las semanas anteriores también ingresaron en cesación de pagos.

Longvie alega que, producto del aislamiento social, preventivo y obligatorio, se paralizaron casi absolutamente su cadena de distribución y los canales de venta y se vio afectada la cadena de pagos y la cobranza de operaciones ya concertadas.

Además, por la cuarentena total cerraron temporalmente las tres plantas de producción de la empresa y las cadenas de electrodomésticos, «principales demandantes de los productos» de Longvie, no abrieron sus sucursales.

Desde 2018 la compañía tiene dificultades financieras y esta no es la primera vez que cae en default. En diciembre de ese año entró en cesación de pagos y comenzó una negociación con los tenedores de sus obligaciones negociables que había emitido en 2017. En enero de 2019 acordó con sus acreedores el pago de intereses y capital.

A fines de 2019, además, logró refinanciar su deuda con bancos por $170 millones y US$500.000, y una hipoteca sobre un inmueble de su titularidad en la provincia de Catamarca.

Ribeiro en default

La cadena de artículos electrodomésticos no pudo hacer frente al pago de una serie de Obligaciones Negociables (ON) por más de $150 millones por las medidas impuestas por el Gobierno vinculadas al combate contra el coronavirus como el aislamiento obligatorio y las restricciones para la continuidad de las actividades de una gran cantidad de sectores de la economía.

Se trata de dos clases de ON en pesos y en dólares con vencimiento durante estos primeros días de abril y que la empresa no pudo cancelar.

“No hemos dado cumplimiento a los pagos vencidos de las Obligaciones identificadas, correspondientes a los días 3 y 6 respectivamente por directa y exclusiva consecuencia de las medidas dictadas a partir de la declaración de Pandemia, realizada por la Organización Mundial de la Salud”, explica la compañía a través de un comunicado enviado a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

Según la carta, que firma su presidente, Manuel Ribeiro, esas consecuencias se agravaron, cuando se ordenó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, a través del Decreto de Necesidad y Urgencia N° 297/2020, y las normas inferiores que reglamentaron y completaron sus disposiciones.

29 ABR 2020. Grimoldi se declara en default

La paralización de su actividad productiva y comercial y el corte de la cadena de pagos a causa de la pandemia fueron el golpe de gracia para la firma.

La empresa de zapatos Grimoldi anunció que no pagará en tiempo y forma el servicio de intereses por 7,3 millones de pesos de obligaciones negociables que había emitido para el mercado local y que vencen este jueves. “La sociedad se encuentra analizando las diferentes alternativas financieras existentes a efectos de poder hacer una propuesta viable a los tenedores a la mayor brevedad posible”, indicó la firma, en relación a una posible reestructuración para llegar a un acuerdo entre privados. En los próximos meses, la empresa tiene por delante vencimientos de deuda por 99,6 millones de pesos. La industria del calzado local arrastra varios años de achicamiento del mercado interno en conjunto con un aumento de las importaciones. La paralización prácticamente total de la actividad productiva y comercial y el corte de la cadena de pagos a causa de la pandemia del coronavirus agudizó los problemas.

“Debido al contexto macro económico actual de Argentina y del impacto producido en la industria del calzado y en particular en la Sociedad por la cuarentena decretada relacionada con la covid-19, la Sociedad no hará efectivo el pago de la cuota correspondiente al 11° vencimiento de los servicios de intereses de las Obligaciones Negociables Serie VIII Clase II”, comunicó la empresa Grimoldi a la bolsa local. La ON en cuestión había sido emitida en julio de 2017 por un total de 250 millones de pesos, a una tasa anual del 36 por ciento.

La situación de Grimoldi se encuadra en un contexto de profunda crisis sectorial. “El sector está en un 95 por ciento paralizado. Las plataformas online están poco desarrolladas por las fábricas y la producción no está autorizada, así como tampoco las exportaciones. La situación financiera es crítica, porque los cheques a 90 o 120 días que teníamos en marzo y abril para cobrar por lo que vendimos en el verano, vinieron casi todos rechazados. O sea que no cobramos lo trabajado para la temporada de verano y la cuarentena nos agarró en la mitad de la producción de la temporada de invierno, que ya nos va a pasar de largo. Recién podremos vender para la próxima temporada de verano, y mientras veremos cómo cobrar el verano del año pasado”, explicó a este diario Horacio Moschetto, secretario de la Cámara del Calzado.

Desde 2018, Grimoldi encaró una serie de medidas para atravesar la crisis, como la reestructuración de su deuda, el despido de personal y cierre de establecimientos. Su último balance contable indica que en 2019 vendió 2,2 millones de pares de calzado, una baja del 40 por ciento en relación a 2018. Esa merma no sólo se explica por la caída de la demanda interna sino también por la aplicación de una política comercial “conservadora”, acortando plazos de cobro. En 2019, Grimoldi registró una pérdida de 275,7 millones de pesos, mientras que en 2018 el rojo había sido de 445,8 millones de pesos. (Télam/La Nación/iprofesional/página12)