27 ABR 2020 – Las compañías estadounidenses afectadas por el coronavirus registran una caída de sus ventas y sus inversiones por primera vez desde la crisis financiera mundial de 2008, según una encuesta realizada por un organización económica publicada el lunes.
Entre ellas reina la incertidumbre sobre cuándo mejorará la coyuntura. Alrededor del 30% de los consultados estima que podría llevar de tres a seis meses, señala la Asociación Nacional de Economía Empresarial (NABE, en inglés) en su informe trimestral.
Los encuestados dicen que el último trimestre “ha sido el peor desde la crisis financiera mundial en términos de ventas, márgenes de ganancia, precios e inversión”, indicó la responsable de la encuesta, Megan Greene.
El informe, realizado sobre la base de las respuestas de 107 economistas que trabajan para empresas o federaciones profesionales en todos los sectores, es una señal más del grave impacto de la pandemia en la economía.
Muchos sectores, como el transporte, los hoteles, los restaurantes, el turismo y el comercio minorista, son víctimas de las medidas de confinamiento para frenar el nuevo coronavirus.
Y más de 26 millones de personas en Estados Unidos se han visto obligadas a solicitar subsidios por desempleo desde mediados de marzo, un nivel inédito.
La encuesta de NABE también muestra que el 86% de los encuestados espera una contracción del crecimiento económico este año, mientras que tres cuartos de ellos dijeron que las perspectivas a corto plazo eran peores en abril que en marzo.
La mayoría de las empresas anticipan una caída en la inversión.
Alrededor de un tercio de los encuestados entre el 13 al 16 de abril dijo que su empresa se había visto “gravemente afectada” por los cierres, aunque solo 2% había cerrado por completo.
La congelación de contratación está muy generalizada. En total, 34% de las empresas encuestadas cerraron sus operaciones total o parcialmente, el 31% envío a sus empleados a licencia y el 17% tuvo que despedir trabajadores.
El Congreso de Estados Unidos ha aprobado casi 3 billones de dólares en ayudas para apoyar la economía frente a la pandemia y las restricciones impuestas para detener la propagación del virus.
Este plan incluye cientos de miles de millones de dólares en préstamos y subvenciones para empresas que luchan por sobrevivir.
La NABE dijo, sin embargo, que casi la mitad de los encuestados no se beneficiarían de estas ayudas. (AFP)