ARGENTINA: Presidente se encamina a legalizar el aborto

Presidente se encamina a legalizar el aborto

BUENOS AIRES, 1 MAR – El presidente argentino, Alberto Fernández, anunció hoy que presentará un proyecto de ley para legalizar el aborto durante la apertura de las sesiones ordinaria y fue aplaudido por los presentes en el Congreso como por cientos de personas que se dieron cita en los alrededores del Parlamento.

La iniciativa fue celebrada por el movimiento feminista que se ha expandido en los últimos años no sólo con la demanda de que la interrupción voluntaria del embarazo deje de ser una práctica clandestina, sino también con reclamos de políticas para frenar femicidios.

“Dentro de los próximos 10 días presentaré un proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo que legalice el aborto en el tiempo inicial del embarazo, y permita a las mujeres acceder al sistema de salud cuando toman la decisión de abortar”, aseguró el mandatario argentino en su discurso en el que también abordó la cuestión de la soberanía de las Islas Malvinas.

“Nuestro hogar común tiene también una herida sangrando en lo más profundo de nuestro sentimiento soberano: la usurpación de Islas Malvinas, Georgias del Sur, y Sandwich del Sur”, declaró Fernández, a quien escuchaban ministros de su gabinete, así como gobernadores provinciales, diputados y senadores, asesores presidenciales, intelectuales, y representantes del sindicalismo y de organismos de derechos humanos, entre otros.

En ese sentido, aseguró el envío de tres proyectos “para afianzar la soberanía territorial de la República Argentina”: la creación del Consejo Nacional de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, el “proyecto de ley sobre la demarcación del límite exterior de la plataforma continental argentina” y la “modificación del Régimen Federal Pesquero (Ley N° 24.922) para endurecer las sanciones a los buques que pescan ilegalmente en los espacios marítimos bajo jurisdicción argentina”.

La vicepresidenta argentina, Cristina Fernández, abrió a las 11.20 (hora local) el 138° período de sesiones ordinarias del Congreso en el que el presidente pronunció su primer mensaje de apertura del año legislativo, el cual incluyó también el envío al Congreso un proyecto de reforma de la Justicia Federal, amén de ordenar a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) “desclasificar los documentos secretos” referidos al atentado a la AMIA.

Dicho atentado, aún impune, que destruyó la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), ocurrió en Buenos Aires el 18 de julio de 1994 y causó la muerte de 85 personas y dejó más de 300 heridos.

El presidente habló una hora y 20 minutos en el Parlamento, donde leyó un discurso que fue ovacionado y aplaudido especialmente cuando llegó al tema de la ley que buscará legalizar el aborto, junto a la cual adelantó que enviará al Congreso nacional un proyecto que instaure el programa de los 1.000 días “para cuidar a la mujer embarazada y a sus hijos en los primeros años de vida”.

También dijo que lanzará “un contundente programa de educación sexual integral y prevención del embarazo no deseado”, entre aplausos que se extendían a la Plaza del Congreso, donde, en un día caluroso y soleado, se acercaron agrupaciones políticas, movimientos sociales y manifestantes de distintos gremios para seguir el mensaje de Fernández. En 2018, el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo obtuvo media sanción en la Cámara baja y generó un debate histórico, pero, a principios de agosto de ese año, el Senado argentino lo rechazó, por 38 votos en contra y 31 a favor.

Tras un largo debate que se prolongó durante más de 16 horas, con alocuciones de 61 de los 72 miembros del Senado, el “no” se impuso gracias a los representantes de las provincias del norte argentino, más conservadoras, en tanto las del centro y sur se mostraban más favorables a la aprobación.

El debate y la votación fueron seguidos entonces por una multitud en la plaza frente al Congreso, bajo una lluvia incesante, dividida entre los “pañuelos verdes” de los favorables a la legalización y los “pañuelos celestes” de los contrarios. (ANSA).