TEHERÁN (IRÁN), ENE 13 2020 – La Cancillería británica convocó al embajador iraní en Londres para trasmitirle su descontento tras el breve arresto al que fue sometido el pasado 11 de enero el representante británico en Teherán, Rob Macaire. En tanto se cumple el tercer día de protesta en Teherán. La policía iraní negó haber reprimido a los manifestantes, informó la agencia de noticias AJN.
El Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido convocó hoy al embajador de Irán en Londres con el ánimo de trasmitirle su descontento tras el breve arresto al que fue sometido el pasado 11 de enero el representante británico en Teherán, Rob Macaire.
Un portavoz del primer ministro británico, Boris Johnson declaró que “fue una violación inaceptable de la Convención de Viena y debe ser investigada. Estamos buscando las garantías completas del Gobierno iraní de que esto nunca volverá a suceder”.
El Gobierno de Londres hará saber sus “fuertes objeciones” lo más pronto posible, ya que el embajador iraní ha sido convocado este 13 de enero, subrayó el alto funcionario británico.
El ministro de Estado para el Desarrollo Internacional y de Medio Oriente de Reino Unido, Andrew Murrison, será el encargado de recibir a la parte iraní.
Al embajador británico en Irán, Rob Macaire, fue detenido por participar de una vigilia en honor de las 176 víctimas que fallecieron en el avión comercial ucraniano que la República Islámica reconoció haber derribado “por error” el miércoles.
Tras su liberación, Macaire agradeció por Twitter “los mensajes de buena voluntad” y explicó que no estaba participando en ninguna protesta. “Fui a un evento descrito como una vigilia por las víctimas del vuelo PS752”, aseguró el diplomático.
“Me marché a los cinco minutos, cuando la gente comenzó a cantar contra el gobierno. Fui detenido media hora tras abandonar la zona. El arresto de diplomáticos es algo ilegal en todos los países”, transmtió.
La cadena británica Sky News informó que Macaire fue detenido como “sospechoso de organizar, provocar y dirigir acciones radicales”, y, por eso, la embajada británica en Teherán emitió una nota de protesta, en la que el canciller Dominic Raab denunció una “violación flagrante del derecho internacional”.
A todo esto, se cumple en Irán el tercer día de protestas consecutivo luego de que el régimen islámico admitiera haber derribado por error un avión ucraniano. Ayer domingo los manifestantes denunciaron haber sido víctimas de una violenta represión por parte de las fuerzas de seguridad a través de las redes sociales.
Los videos mostraban a docenas de policías con equipo antidisturbios en otra área de Teherán.
Sin embargo, las autoridades negaron haber reprimido a los manifestantes. “La policía en la capital iraní no disparó contra los manifestantes y los oficiales han recibido órdenes de mostrar moderación”, declaró el jefe de policía de Teherán en un comunicado publicado en el sitio web de la emisora estatal.
Los videos publicados en las redes sociales registraron disparos cerca de las protestas y mostraron charcos de sangre. También mostraron imágenes de personas heridas transportadas por otros.
“En las protestas, la policía no disparó porque los policías de la capital recibieron órdenes de moderación”, dijo Hossein Rahimi, jefe de la policía de Teherán.