La iniciativa fue aprobada esta madrugada por 41 votos a favor, 23 en contra y una abstención tras un debate de casi ocho horas en el que 33 senadores, sobre 65 presentes, hicieron uso de la palabra. El senador de Juntos por el Cambio, el entrerriano, Alfredo De Angeli, rechazó “delegar facultades” propias del Congreso y se preguntó: “¿Cómo vamos a volver a nuestras provincias?”.
CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, DIC 21 – La Cámara de Senadores aprobó esta madrugada la ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva, enviada por el Ejecutivo al Congreso, con 41 votos a favor, 23 negativos y una abstención, en el debut de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner como titular del cuerpo. Se espera que sea promulgada en las próximas horas.
El debate se reinició pasadas las 19, y el oficialismo logró el quórum sin la presencia de la oposición que, sin embargo, no impidió que el Frente de Todos lograra los votos positivos de los dos tercios de los miembros presentes en el recinto que se requieren para debatir la cuestión sobre tablas.
El debate se reinició pasadas las 19.
La iniciativa, que establece nueve emergencias entre la económica, tarifaria, energética, sanitaria y social hasta el 31 de diciembre de 2020 y suspende por seis meses la movilidad jubilatoria, sancionada en 2017, recibió el apoyo del conjunto de los senadores del Frente de Todos, del santafesino Carlos Reutemann y el rionegrino Alberto Weretilneck y el rechazo de toda la bancada de Juntos por el Cambio.
El proyecto de ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva contempla la declaración de la emergencia pública hasta el 31 de diciembre de 2020, para aplicar medidas ante la crisis económica y social y sentar las bases para promover el desarrollo productivo.
Los principales ejes son la creación de un impuesto a la compra de dólares para turismo o atesoramiento, aumento de alícuotas del impuesto a los bienes personales, moratoria para las pymes, congelamiento y revisión de las tarifas, suba en los derechos de exportación de granos y oleaginosas (retenciones), y la suspensión de la movilidad jubilatoria.
Se eximen de esta medida a las víctimas de la Ley Brisa, judiciales, docentes, ex funcionarios nacionales y científicos ya que ambos grupos tienen sistemas que garantizan un determinado ingreso con relación a los activos.
El texto, que había obtenido media sanción en la Cámara baja, en la mañana del viernes, tras una maratónica sesión de poco más de 19 horas, ingresó al Senado a las 15.50, lo que motivó que el debate –convocado para las 14- se retrasara hasta pasadas las 19 a pedido de la oposición para poder analizar el texto.
El receso fue aceptado por el jefe del bloque oficialista José Mayans. Sin embargo, se acordó que previo al mismo se pondrían a consideración otros temas. Así el Senado aprobó el permiso para que el presidente Alberto Fernández viaje al exterior y –por unanimidad- el ingreso y salida de tropas extranjeras para ejercicios combinados.
Por su parte, el titular del interbloque de Juntos por el Cambio, Luis Naideno justicó la votación en contra de la oposición porque consideró que la declaración de la emergencia era innecesaria.
“Cuando se tienen mayorías y la voluntad de una oposición de construir, ¿para qué repetir la historia de nueve emergencias? Tienen un país gobernado y gobernable, no tienen necesidad de esta delegación”, precisó.
Además, insistió con que “esta es una ley que esconde un ajuste enorme, con mayor carga tributaria que pagan los sectores medios y los sectores productivos”.
Además, aprobaron por 63 votos a favor, uno en contra y una abstención, el nuevo pacto fiscal acordado con los gobernadores. El mismo suspende el acuerdo que regía desde 2017 y les permite a las provincias recaudar más impuestos en sus respectivos territorios.
El senador del PRO, Esteban Bullrich, se mostró muy duro y manifestó: “Es un día triste para nuestro bloque y para la República, porque después de la asunción de Alberto Fernández me había esperanzado con el llamado al diálogo”. “Esa esperanza se diluye con este proyecto de ley ya que ignora las instituciones, hace de este Senado una herramienta inútil para la construcción de consensos”, indicó.
“No somos el Congreso del Presidente Fernández. Somos el Congreso de todos los argentinos. El hedor en esta Cámara no se va a ir luego de la aprobación, va a continuar mientras la ley continúe vigente”, señaló.
El senador por la Ciudad de Buenos Aires, Martín Lousteau, hizo su debut en la Cámara alta criticando el proyecto de emergencia. “En campaña el Presidente dijo que le iba a pagar a los jubilados con plata de los bancos. Acá se le paga a los jubilados con la plata de los jubilados que ganan un poco más”, lanzó y continuó sobre el debate: “Esto no es cerrar la grieta, no es buscar consenso ni trabajar juntos”.
En tanto, la senadora tucumana Silvia Elías de Pérez expresó: “Nos dijeron que enviaban un proyecto de solidaridad y, en su lugar, quieren explotar a los jubilados, quitándoles la movilidad jubilatoria”. Además, lanzó: “Quieren pelearse con el campo, cuando es el corazón productivo de la Argentina. Tenemos de nuevo a los productores cortando las rutas”.
La ley aprobada también autoriza al Poder Ejecutivo a intervenir el Ente Regulador de la Electricidad (ENRE) y el Ente Regulador del Gas (ENARGAS) y habilita al Gobierno a congelar las tarifas de electricidad y gas por el plazo de 180 días, plazo en el que se va a iniciar un proceso de renegociación de la Revisión Tarifaria Integral vigente.